He visto pasar muchos proyectos. Algunos han sido éxitos asombrosos, otros... bueno, digamos que han dejado un poco de amargura. Hoy quiero compartir con ustedes la experiencia de un proyecto que, lamentablemente, no alcanzó los resultados esperados.
El Contexto: Un E-commerce Ambicioso
Se trataba de un negocio establecido, con más de seis mil productos y la voluntad de crear un e-commerce único. El objetivo era claro: un sitio moderno, personalizado, que cuidara la imagen de la marca y también se dirigiera a las nuevas generaciones. ¿El sector? Remedios naturales, un mercado en crecimiento con una clientela atenta e informada. Estudio de Imagen Corporativa, logotipos, colores.
Mi Solución: Un Enfoque SAS con Drupal y React
Decidí proponer el proyecto en la forma de Software as a Service (SAS), un modelo que me permitía ofrecer no solo desarrollo, sino también asesoría continua. Aproveché mis habilidades en Php, Node.js y React.js, tecnologías en las que había estado trabajando durante tiempo, para crear una estructura reactiva y eficiente. Incluso subí personalmente todos los productos, cuidando las traducciones y presentaciones.
Los Errores (y las Lecciones) a No Repetir
Aquí es donde las cosas empezaron a complicarse:
- La Cláusula de Transferencia: Incluí en el contrato una cláusula que permitía al cliente transferir el proyecto a su propio servidor después de dos años. La cláusula tenía como objetivo proteger la inversión del cliente. La transferencia estaba, sin embargo, contratualmente vinculada a un costo. Un error, dicho sea de paso. Esto creó una expectativa que luego se transformó en una exigencia, cuando el cliente decidió cerrar el e-commerce y solicitó una copia del sitio.
- El Contencioso Inútil: El cliente no quiso pagar el monto debido por la transferencia, desencadenando un contencioso que decidí interrumpir liberando el código. La razón es que el cliente opera en el extranjero y estos contenciosos en el exterior son complejos y muy arriesgados. Un compromiso, sí, pero que me dejó mucha frustración.
- La Tentación de la "Garantía" al Cliente: Cedi a la tentación de ofrecer una garantía adicional que, en realidad, resultó ser un boomerang. Liberar el código fuente nunca es una buena idea, especialmente en proyectos personalizados complejos.
- La Falta de Claridad en la Contratación: Nunca hay que ser demasiado "amigo" de los clientes, especialmente cuando se trata de definir los costos y las responsabilidades. Una penalización por la salida anticipada del contrato es fundamental, al igual que la cláusula que prohíbe la liberación del código fuente.
La Realidad de los Costos y las Expectativas
Un proyecto de este tipo, con seis mil productos en cuatro idiomas y una arquitectura personalizada, puede fácilmente oscilar entre 40.000 y 70.000 euros. Un costo que muchos clientes no están preparados para afrontar, especialmente si no tienen una visión clara del valor añadido de un e-commerce personalizado.
El Paradoja de las Plataformas Gratuitas
Es fácil dejarse tentar por las plataformas gratuitas o aparentemente gratuitas, pero el resultado suele ser decepcionante. He visto sitios web realizados con estas soluciones que parecen salir de una época pasada, inusables y poco profesionales. Aunque todo esto es visible en los resultados en términos de ROI sobre la inversión, el cliente está confundido sobre el tema de los costos reales de las tecnologías informáticas. En este "guirigay" los gestores de las plataformas gratuitas (aparentemente), operando con grandes números, generan ingresos enormes.
El Consejo Final para los Desarrolladores Freelance
- Sean Claros y Directos: No se dejen atrapar por los clientes. Es mejor ser claros y precisos
- Contratos Sólidos: Eviten cláusulas que puedan volverse en su contra.
- No CEDAN a la Tentación: Nunca liberen el código fuente.
- Evalúen las Expectativas: Si un cliente no está preparado para afrontar los costos reales de un proyecto personalizado, es mejor dejarlo estar.
Conclusión: Decepciones y Crecimiento Profesional
Este proyecto suspendido ha sido una experiencia amarga, pero también una valiosa lección. Me ha enseñado la importancia de ser claros, directos y no ceder a las tentaciones que pueden comprometer su profesionalidad. Y, sobre todo, me ha confirmado que el éxito en el mundo del desarrollo freelance se basa, sin duda, en la transparencia, en la competencia, pero sobre todo, en una buena dosis de realismo.
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